“Y
todo a media luz…”
“Y todo a media luz…”
decía la letra del tango de Carlos César Lenzi y todo a media luz fue como se
desarrolló la novillada concurso programada para el domingo 11 de septiembre en
la localidad madrileña de Guadalix de la Sierra. Un festejo que empezó con dos
horas de retraso por la ausencia de la cuadra de picar debida a una avería
sufrida por el camión que la transportaba. El festejo tuvo que ser suspendido
a la muerte del segundo novillo por la falta de luz.
Así
las cosas, los novilleros actuantes Juan Miguel y Alejandro Fermín solo
pudieron dar cuenta de los dos primeros utreros.
El
madrileño Juan Miguel se vio las caras ante un ejemplar feo de hechuras y
encastado que empujó en varas y que resultó muy codicioso en la muleta de "Partido de Resina". Juan
Miguel lo lanceó con gusto a la verónica, pero no acabó de acoplarse con la
encastada embestida del animal en la faena de muleta. No estuvo acertado con
los aceros y su labor fue silenciada tras recibir un recado presidencial.
Por
su parte, el cacereño Alejandro Fermín se las entendió con un burel de Zacarías
Moreno, bien presentado y bravo que empujó en varas, aunque tardeó en el
segundo encuentro, y que llegó embistiendo con codicia, temple y profundidad a
la faena de muleta. Fue fuertemente ovacionado en el arrastre. Casi no pudo
estirarse con él el cacereño en los lances de recibo, solo dos verónicas y una
media de remate. Con la franela, aprovechó Fermín al de Zacarías en dos series
con la mano diestra y otra más con la zurda en las que se sucedieron los
muletazos templados y de largo trazo. Siguió Alejandro su trasteo al natural en
otras dos series que resultaron algo más deslucidas porque el animal empezó a
pararse. No obstante, de las muñecas del cacereño todavía salieron algunos
buenos muletazos. Faena de premio gordo que, sin embargo, Alejandro Fermín
malogró con el mal manejo de los aceros y todo quedó en una ovación con
saludos.
Llegados
a este punto, faltaban pocos minutos para las nueve de la noche y ésta se había
echado ya sobre la plaza de toros de Guadalix de la Sierra por lo que hubo que
suspender este festejo que se desarrolló a media luz.
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Esperando el momento del paseíllo. |
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Se inicia el paseíllo sin los caballos de picar. |
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Juan Miguel lanceando la la verónica al partido de resina. |
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El de "Partido de Resina" empujando en el primer puyazo. |
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Arrancándose en el segundo encuentro. |
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El de Zacarías Moreno. Un tío. |
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Alejandro Fermín estirándose con el capote. |
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Fermín citando al de Zacarías. |
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Desplante de Alejandro Fermín. |
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