TALAMANCA DEL JARAMA (MADRID). LUNES 24 DE ABRIL DE 2017. NOVILLADA SIN PICADORES

Pedro Gallego salió en hombros por la puerta grande.

PEDRO GALLEGO PONE EL TRIUNFO.

DANIEL BARBERO, EL TOREO

Una novillada sin picadores abrió la tradicional Feria Taurina de Talamanca del Jarama en honor a Ntra. Sra. de la Fuente Santa. Un festejo que resultó entretenido por el juego ofrecido por los novillos de Ángel Luis Peña y por el hacer de los novilleros Pedro Gallego que salió en hombros y Daniel Barbero que perdió tal derecho por su fallo con los aceros.

Fue notable el encierro lidiado por el ganadero colmenareño Ángel Luis Peña. Un conjunto bien presentado, encastado y de buen juego, del que destacaron el bravo segundo, premiado con la vuelta al ruedo, y el tercero que fue ovacionado en el arrastre.

Con esta materia prima sobre la arena, el novillero Pedro Gallego salió en hombros tras cortar las dos orejas al buen tercero. Recibió, Gallego, a este novillo con unas airosas verónicas y destacó en un quite por saltilleras con el que replicó al interpretado por verónicas por su compañero de cartel. Ya con la muleta, instrumentó una voluntariosa faena por ambos pitones en la que destacaron las entonadas series con la mano diestra. Cerró su trasteo con unas valerosas manoletinas. A sus manos fue a parar el doble trofeo tras una estocada y dos golpes de descabello. Con el encastado novillo que abrió plaza, se mostró voluntarioso y decidido, aunque no acabase de estar a gusto con él.

Daniel Barbero pudo acompañar a su compañero de cartel en su salida por la puerta grande, sin embargo, se cerró esta posibilidad por su mal manejo de los aceros. Barbero se pudo haber ganado este galardón por su labor ante el bravo segundo, novillo al que recibió de manera airosa por verónicas. Ya con la muleta, inició su labor con unos toreros doblados por bajo. Continuó su trasteo en series por ambas manos en las que hubo muletazos de mucho gusto, largos, templados y de mano baja. Una faena que mantuvo el interés y la emoción por el buen hacer de Barbero y por la gran condición del novillo, un bravo ejemplar que se arrancaba de lejos, que humillaba arrastrando el hocico por el albero, que tuvo fijeza y transmisión. Fue una actuación merecedora de premio importante, sin embargo, Daniel no fue capaz de rubricarla como se merecía. Marró de manera estrepitosa con los aceros y vio como ésta fue silenciada mientras que el novillo de Peña era premiado con la vuelta al ruedo póstuma. Su labor ante el cuarto, otro buen ejemplar de la divisa colmenareña, resultó irregular destacando algunos pasajes al natural.

La feria talamanquesa continua este fin de semana con dos novilladas con picadores cuyas combinaciones son las siguientes:

-Sábado, 29 de abril: Novillos de Ángel Luis Peña para Juan Carlos Benítez y José Manuel.

-Domingo 30 de abril: Novillos de “Casasola” y Juan Martín Pérez Tabernero, para Maxime Solera y Aquilino Girón.

Ambos festejos comenzarán a las seis en punto de la tarde. 

Paseíllo realizado bajo incipiente lluvia.

Pedro Gallego no llegó a estar a gusto con el encastado primero.

Momento con la mano diestra de Daniel Barbero ante el
bravo segundo.

Pasaje al natural ante este bravo ejemplar.

El bravo novillo de Ángel Luis Peña, herrado con el número 25,
fue premiado con la vuelta al ruedo en el arrastre.

Por saltilleras replicó Pedro Gallego al quite por verónicas
interpretado por Daniel Barbero.

La faena de Barbero ante el que cerró plaza tuvo altibajos,
pero tuvo detalles sobre la mano zurda.

LAS VENTAS (MADRID). CORRIDAS DE TOROS DEL DOMINGO DE RAMOS (09/04/2017) Y DOMINGO DE RESURRECCIÓN (16/04/2017)

Brindis al cielo por Adrián.

DOMINGOS DE PASIÓN

Los pasados domingos de Ramos y Resurrección, tuvieron lugar en la monumental plaza de toros de Las Ventas las dos primeras corridas de toros de la presente temporada taurina. Dos festejos que levantaron gran expectación en el momento de ser anunciadas y que, además, venían precedidas de dos importantes novilladas. Sin embargo, ninguno de estos dos festejos mayores respondió a esas expectativas creadas.

Triste Domingo de Ramos

La corrida del Domingo Ramos estuvo marcada por la triste noticia del fallecimiento el día anterior de Adrián Hinojosa, el niño valenciano enfermo de cáncer que soñaba con ser torero. Por él se guardó un emotivo minuto de silencio y a él fueron destinados los brindis de los espadas actuantes que no fueron otros que Iván Fandiño, Alberto Aguilar y Gómez del Pilar que confirmaba la alternativa quienes hicieron el paseíllo para estoquear un encierro de la vacada de Victorino Martín.

Respondió el público a este cartel ocupando más de las tres cuartas partes del aforo del coso capitalino. Todo estaba dispuesto para vivir una gran tarde toros, sin embargo, todo se truncó a medida que iba transcurriendo el festejo.

Los toros de Victorino Martín, desiguales de presentación, no se lo pusieron fácil a la terna actuante pues fueron muy complicados, solo el segundo del festejo resultó toreable. El encierro estuvo remendado con un sobrero de "San Martín". Lidiado en sexto lugar, fue manejable, aunque escaso de fuerza.

Lo más destacado de la tarde, llevó la firma de Alberto Aguilar con el sobrero que cerró plaza. Alberto planteó una faena templada. Siempre con la muleta a media altura, para mantener en pie a su oponente, consiguió el madrileño dibujar muletazos con ambas manos de bello trazo. La faena cogía vuelo a media que avanzaba el trasteo. Sin embargo, Alberto erró reiteradamente con los aceros por lo que perdió un importante triunfo que quedó reducido a una ovación con saludos tras dos avisos. Con el manso y complicado tercero, se mostró muy firme y asentado y consiguió imponerse a las escasas posibilidades de su oponente.

Encabezó la terna Iván Fandiño. En primer lugar, el de Orduña lidió el victorino más toreable. No acabó de estar a gusto Fandiño en un trasteo con muchos altibajos en el que hubo algún pasaje destacado con la mano izquierda. El segundo de su lote fue un animal manso, bronco, con poder y movilidad que propició un vibrante inició de faena en el que Fandiño tuvo que tragar mucho en dos series sobre la mano diestra. Sin embargo, el de Orduña no supo contrarrestar la posterior pérdida de fuelle del albaserrada. Poco importó esto último, el tendido ya había tomado partido por el burel y, a pesar de no estar a la altura, el respetable trató injustamente a Fandiño ovacionando de forma un tanto incompresible al victorino.

Completó la terna Gómez del Pilar quien, a pesar de su escaso bagaje, confirmó dignamente la alternativa ante un lote de escasas posibilidades. Destacó por su firmeza y decisión.

Domingo de decepción

Decepcionante fue la corrida del Domingo de Resurrección en la que se repetía el heroico mano a mano que protagonizaron en la pasada Feria de Otoño Curro Díaz y José Garrido, ahora ante un encierro de “Montealto”, una de las ganaderías más destacadas de la pasada temporada en el coso capitalino. Sin embargo, este festejo “de resurrección”, se convirtió en “de decepción”, principalmente, por el escaso juego de los astados. Fue este un encierro de feas hechuras, grande y con muchos kilos, más propio de ser corrido en las calles en cualquier festejo popular que de lidiarse en la primera plaza del Mundo, que resultó manso y descastado.

Con este material, lo más destacado fue el toreo de capote de Garrido ante sus dos primeros oponentes y el esbozo de faena que interpretó Curro Díaz ante el quinto de la tarde.

Garrido se lució en el saludo al primero de su lote al que recibió con un ramillete de verónicas con rodilla en tierra saliéndose a los medios. Siguió por este palo con la planta erguida y remató con una buena media. También destacó su toreo de capote ante el cuarto: tanto en las verónicas de recibo, como en el ajustado quite por chicuelinas que interpretó. Lo demás, poco más que contar, solo el torero inicio de faena por bajo a su primero, un toro que sí pareció prestarse para el lucimiento, sin embargo, Garrido se apagó en la distancia corta y el toro se apagó con él.

Por su parte, Curro Díaz, pasó casi de puntillas toda la tarde ante el escaso juego ofrecido por sus oponentes. Solo su trasteo ante el quinto, un toro también manso, pero con movilidad, consiguió conectar con los tendidos. Tuvo emoción este trasteo, pero más por la movilidad del astado. Cierto es que Curro compuso la figura y que llegó a instrumentar algún muletazo aislado, sin embargo, no es menos cierto que la faena resultó muy enganchada y que le faltó temple y poso.

Fandiño con el primero de su lote.

Alberto Aguilar firmó lo más destacado del Domingo de Ramos
ante el sobrero de "San Martín" que cerró plaza.

Momento de la confirmación de alternativa de Gómez del Pilar.

Muy digna fue la actuación de Gómez del Pilar.

"Jarocho" de la cuadrilla de Iván Fandiño tuvo que saludar
tras parear al cuarto.

Curro Díaz y José Garrido tuvieron que saludar una ovasión
tras el paseíllo de la corrida del Domingo de Resurrección.

Por verónicas rodilla en tierra recibió Garrido a su primero.

Quite por chicuelinas de Garrido al cuarto.

Muletazo con la diestra de Curro Díaz al quinto "montealto".

Muletazo con la izquierda.

Antonio Chacón, de la cuadrilla de Garrido, sufrió un percance
en el tercio de varas del cuarto de la tarde por el que tuvo que
pasar a la enfermería.

"TORRELAGUNA Y LOS TOROS". VIERNES 21 DE ABRIL DE 2017, SEIS DE LA TARDE. FORO DE HISTORIA LOCAL DE LA BIBLIOTECA "JUAN DE MENA" DE TORRELAGUNA

El próximo viernes 21 de abril, la Biblioteca "Juan de Mena" de Torrelaguna se convertirá en figurado coso taurino para acoger la conferencia "Torrelaguna y los Toros". Una conferencia que se enmarca dentro del ciclo "Foro de Historia Local" que organiza la citada biblioteca y en la que participaré junto a Jorge Benito, con la inestimable colaboración de José Cid, para presentaros los trabajos que ya llevamos realizados con el fin de recabar toda la tradición taurina de nuestra localidad. Tradición que se remontaría hasta 1538.

Como avance a esta conferencia, aquí os dejo un texto que apareció en el Libro de las Fiestas de nuestra localidad de 2014 que firmamos Jorge y yo y que da unas pequeñas e interesantes pinceladas de los que será esta charla que no os debéis perder. La cita, como os digo, el próximo viernes 21 de abril a las seis de la tarde en la Biblioteca "Juan de Mena" de Torrelaguna. Seguro que será una gran tarde de Toros e Historia. Os esperamos.

Plaza de Toros en construcción. Foto extraída del libro
"Pueblos de la Sierra Norte de Madrid. Imágenes para el recuerdo".

TORRELAGUNA Y LOS TOROS

La Fiesta de los Toros en Torrelaguna goza de profundas raíces culturales e históricas. Ya en 1538, nuestra localidad solicita permiso para celebrar corridas de toros con motivo de la firma del Tratado de Niza entre Francisco I de Francia y el emperador Carlos V.

Este documento, recogido por el que fuese crítico taurino de la agencia EFE Isidoro Rodríguez “Doro” en su libro “Documentos históricos taurinos”, podría ser el primer documento escrito que acredite esta tradición, aunque es posible que nuestra costumbre de “correr toros” date del siglo XV.

Según los datos encontrados en el Archivo Municipal, a lo largo de los siglos XVI y XVII, observamos la celebración de estos festejos taurinos por motivos similares, como la llegada a la villa del Concejo de la Mesta en 1593, y, principalmente, con motivo de festividades religiosas como San Nicasio, el Corpus Christi, Ntra. Sra. del Rosario o Santa Águeda

Estos espectáculos distarían mucho de lo que conocemos en la actualidad pues eran lo más parecido a un torneo protagonizado por los caballeros de la nobleza local en el que las suertes practicadas serían, entre otras, el alancear y picar toros a caballo, lo que se podría calificar como los inicios del rejoneo

Será en el siglo XVIII cuando encontramos los albores del toreo actual pues el toreo a pie comienza ganar terreno al practicado a caballo. Caprichos de la Historia, es de este período del que menos información disponemos actualmente.

Es en el XIX cuando estas celebraciones empiezan a encontrar cabida dentro de las Fiestas Patronales en honor a la Virgen de la Soledad. Lo que podemos fechar ya en el año 1830: el 1 de julio, Torrelaguna y sus alrededores sufren una tremenda tormenta de granizo que hizo que los campesinos y labradores temieran por sus cosechas, sin embargo, éstas no sufrieron daño alguno. Tal milagro fue atribuido a la Virgen de la Soledad, a quien  los torrelagunenses se habían encomendado. En señal de gratitud por esta intercesión de la Virgen, se solicita un permiso para “rifar un toro para correrlo” cuyos beneficios se destinarían para sufragar los gastos de las funciones religiosas y para “correr media docena de vacas” en su honor.

O también en 1848, a través de los acuerdos tomados en la sesión plenaria del 19 de junio donde se aprueba la compra de madera para la construcción de la plaza de toros en la plaza de la villa.

Paseíllo en 1908. Foto: Carmen Morena Muñoz.

Hoy, perdura esta tradición de programar festejos taurinos en nuestras Fiestas Patronales, aunque hay que señalar que, durante el siglo pasado, también se dieron toros fuera de estas fechas. Por ejemplo, en 1959, además de los tres festejos que se organizaron con motivo de las honras a Nuestra Patrona, se programaron tres más durante el mes de agosto y otros dos en los dos fines de semana posteriores a las Fiestas; y el 14 de octubre de 1960, se celebró un festival taurino con motivo del Día de la Provincia.

Las novilladas de promoción, incluidas las organizadas por la Peña Taurina “Manuel Vidrié” entre los años 1985 y 1994, coparán durante años estas funciones taurinas.

Las novilladas con picadores también tuvieron su protagonismo a partir de finales de la década de los ochenta del siglo pasado, aunque la primera de ellas tuviese lugar en 1979.

También en los ochenta, suscitaron gran interés las corridas de rejones, donde actuaron las máximas figuras de la época, y los festivales taurinos, protagonizados por algunos de los toreros más destacados del momento.

En 1999, se celebra la primera corrida de toros, espectáculo que se  dio hasta 2005 y que llegó a contar con dos funciones entre 2001 y 2003.

Y no podemos olvidar los festejos taurinos populares: las becerradas locales en las que los aficionados de nuestro municipio mostraban (y muestran) sus conocimientos de Tauromaquia; o los añorados “Toro del Aguardiente”, “Toro del Campo” y los “encierrillos” desde la Puerta del Sol.

Pero, sin duda, el espectáculo más afamado y con más solera es el encierro, hoy reminiscencia del aquel traslado a pie de las reses desde su dehesa hasta la plaza en que se iban a lidiar.

Encierro en 1908. Foto: Carmen Morena Muñoz.

Existe documentación del siglo pasado que muestra como, en los días previos a la Función, las reses a lidiar, pertenecientes a ganaderías situadas en localidades cercanas, llegaban acompañadas de cabestros y vaqueros a las afueras de nuestro municipio donde permanecían hasta el día en que iban a ser lidiadas, momento en el que la manada accedía a la plaza de toros tras pasar por las hoy calles Malacuera y Cardenal Cisneros.

Así ocurrió hasta que este traslado comenzó a realizarse en camiones. Desde entonces, el encierro mantuvo su recorrido por las calles citadas anteriormente, fijando su inicio donde hoy se encuentra el Centro de Salud.

En los últimos veinte años, este recorrido varió hasta en cuatro ocasiones con motivo de los cambios de ubicación del coso taurino: calle Malacuera –por debajo de la antigua Quesería– (1995-1996); final de la calle San Francisco (1997-2005), y final de la calle Lilas (2006-2012). En estos casos, el encierro siempre transitó por las calles de costumbre, aunque en sentido contrario al habitual.

En 2013, la plaza de toros volvió a su ubicación tradicional, sin embargo, el encierro no recuperó su añorado transitar pues se fijó su salida en la calle San Francisco a la altura de la parada del autobús.

Encierro en 1920. Foto: Juan Sanz Montero.

Con todo lo visto, no es de extrañar que esta enraizada tradición motivase que algún torrelagunense se decidiese a probar fortuna en el mundo taurino. De hecho, han sido varios los que emprendieron este camino, destacando a Valentín Martín (1854-1936), único matador de toros de alternativa nacido en nuestra localidad, quien, ya apartado de los ruedos, se convirtió en el primer asesor de la plaza de toros de Madrid; y, por supuesto, Manuel Vidrié (1942), una de las máximas figuras del toreo a caballo de todos los tiempos.

Y hasta aquí este relato  que no es más que una pequeña muestra de las primeras investigaciones realizadas con el fin de llegar a conocer los orígenes de esta enraizada tradición de nuestro municipio.

Moisés Celestén Lozano

Jorge Benito Martínez

Texto aparecido en el Libro de las Fiestas de Torrelaguna de 2014

GUADALAJARA. DOMINGO, 2 DE ABRIL DE 2017. NOVILLADA SIN PICADORES.

VÍCTOR HERÁNDEZ, JOSÉ ROJO Y LA GANADERÍA DE POLO SAIZ

TRIUNFAN EN GUADALAJARA

Una exitosa novillada sin picadores ha puesto el punto final a la Feria de Primavera celebrada este fin de semana en el Coso de las Cruces de Guadalajara. Exitosa por el juego ofrecido por los erales lidiados de la ganadería de Polo Saiz que, aunque de comportamiento desigual, han resultado manejables en general. Y exitosa por la disposición y buen hacer de la terna actuante. No obstante, los novilleros Víctor Hernández y José Rojo salieron en hombros tras cortar tres orejas cada uno. No les pudo acompañar Álvaro Sánchez que perdió tal galardón por su mal manejo de los aceros.

No pudo empezar mejor este festejo celebrado en horario matinal. Pues en primer lugar se corrió el mejor novillo del encierro, un ejemplar de gran clase que respondía al nombre de “Justiciero” y que fue premiado con la vuelta al ruedo en el arrastre. Este ejemplar le tocó en suerte a Víctor Hernández que lo cuajó desde que le eral salió por chiqueros. Lo recibió con dos largas afaroladas de rodillas en el tercio. También de hinojos, siguió lanceando a la verónica, para continuar por igual palo con la planta erguida. Se mostró variado en un quite con el que replicó al realizado por José Rojo por afarolados de rodillas. Ya con la pañosa, inició su labor toreando en redondo de rodillas. Ya enhiesto, se mostró muy a gusto en series con ambas manos en las que destacaron las series instrumentadas con la mano izquierda en las que hubo muletazos de muy bella factura. Tras las bernadinas finales, anduvo eficaz con la espada y a sus manos fueron a parar las dos orejas de este gran “Justiciero”.

Una oreja más cortaría del cuarto, un novillo manso que se aquerenció en tablas en los primeros tercios, pero que llegó con mucha nobleza a la faena de muleta. Con éste, Hernández no pudo estirarse en los lances de recibo y no pudo pasar de dispuesto en el quite por tafalleras y cordobinas con el que replicó al realizado por José Rojo por saltilleras. Sin embargo, sí consiguió exprimirle en una buena faena de muleta en la que destacó manejando la mano diestra. No anduvo fino manejando los aceros lo que no obstó para que se premiase su labor con un apéndice.

Tres orejas cortó también José Rojo. Una obtendría del segundo, novillo de mucha nobleza, pero de escasa fuerza. A este novillo, lo recibió lanceando a la verónica, primero de rodillas y luego con la planta erguida. No entró a replicar el quite que Álvaro Sánchez realizó por saltilleras. Con la muleta, anduvo muy templado y con mucho gusto en una faena en la que destacaron las series al natural. Cerró la faena con unas manoletinas de rodillas y vio como la faena era premiada con una oreja a pesar de no estar acertado manejando los aceros.

Las dos orejas cortaría Rojo del quinto de la mañana, un novillo de mucha nobleza, pero al que le costaba mantenerse en pie. A este ejemplar, lo recibió José a portagayola con una larga cambiada. Otra más le recetaría ya en el tercio antes de seguir lanceando de forma vistosa y variada ya enhiesto. Muy templado se mostró en la faena de muleta consiguiendo que el novillo no perdiese las manos. Además, de sus muñecas brotaron muletazos largos y templados, sobre todo, al natural. Se mostró eficaz con la tizona tras las bernadinas con las que cerró la faena y a sus manos fue a parar el doble trofeo.

Menos suerte corrió Álvaro Sánchez que sorteó el peor lote del encierro de Polo Saiz. Manso, con querencia a tablas, y de incierta embestida resultó el tercero. Consiguió, Álvaro, estirarse en el recibo a la verónica. Quitó por chicuelinass replicando el quite por saltilleras realizado por Hernández. Posteriormente, interpretó un meritorio tercio de banderillas, sobre todo, en un par puesto por los adentros. Y se mostró muy firme y decidido en una porfiona faena de muleta. Cobró una efectiva estocada y vio como su labor era premiada con una oreja.

También manso y aquerenciado en tablas resultó el que cerró plaza. A este ejemplar, lo recibió de rodillas con un ramillete de largas afaroladas. Intervino en quites al alimón con Víctor Hernández tras las gaoneras interpretadas por este último. Como en su anterior turno, también intervino en banderillas colocando hasta cuatro pares, el último de banderillas cortas. Ya con la muleta, inició su trasteo sin probaturas toreando de rodillas sobre la mano diestra desde el centro del anillo. Fue entonces cuando el astado buscó el abrigo de las tablas donde Sánchez tuvo que plantear la pelea que rehuía el de Polo Saiz. Muy porfión y tesonero, consiguió momentos estimables sobre la mano diestra. Tenía Álvaro cortada la oreja que le valdría para acompañar a sus compañeros de terna en la salida por la puerta grande, sin embargo, falló de manera reiterada con los aceros y vio como el premio a su porfiona actuación se veía reducido a una ovación con saludos.

Finalizado el festejo, José Terrón, el mayoral de la ganadería, saludó desde el tercio. Álvaro Sánchez abandonó a pie el coso guadalajareño entre la ovación del público asistente. Y Víctor Hernández y José Rojo fueron sacados a hombros en una triunfal salida por la puerta grande.

Se inicia el paseíllo.

Víctor Hernández toreando al natural al primero de la tarde.

"Justiciero" se llamaba el primero y fue premiado con la vuelta
al ruedo en el arrastre por su extraordinaria nobleza.

José Rojo toreando al natural al segundo de la tarde.

Álvaro Sánchez cuajó un importante tercio de banderillas
ante el tercero.

Cordobina de Víctor Hernández al cuarto.

La cuadrilla de Víctor Hernández estuvo a buen nivel
en el tercio de banderillas del cuarto.

José Rojo recibió a portagayola al quinto del festejo.

José Rojo también cuajó al quinto por naturales.

Quite al alimón de Álvaro Sánchez y  Víctor Hernández en el sexto.

De hinojos comenzó Álvaro Sánchez su trasteo muletero
en el que cerró plaza.

SAN SEBASTIÁN DE LOS REYES (MADRID). SÁBADO, 1 DE ABRIL DE 2017. NOVILLADA CON PICADORES.

PUERTA GRANDE DE ÁLVARO GARCÍA

EN SU ENCERRONA SOLIDARIA

El novillero Álvaro García salió en hombros por la puerta grande de la plaza de toros de San Sebastián de los Reyes tras cortar cuatro orejas al encierro de diferentes ganaderías de desigual presentación y juego dispar que lidió en su encerrona solidaria a beneficio del Comedor Social de la Hermandad del Stmo. Cristo de los Remedios de la citada localidad madrileña.

Gracias a la amabilidad del público asistente que, de manera aparente, llenó la mitad del aforo del coso taurino, el novillero Álvaro García empezó a ganarse la puerta grande en el tercer novillo de la tarde, astado perteneciente a la ganadería de Antonio López que salió con muchos pies y que pareció quedar lesionado en una mano en un giro en los primeros compases de la lidia. Empujó con fuerza en varas llegando a derribar al picador por lo que este primer tercio tuvo que ser cubierto con el picador que hacía la puerta, pero llegó parado a la muleta. No consiguió estirarse García en el recibo capotero, aunque sí fue muy jaleado el quite por gaoneras. Con el público ya muy a favor, inició el sansebastianero el trasteo muletero. Fue esta una labor poco lucida por la condición del novillo. Solo dos feas volteretas, afortunadamente, sin consecuencias sufridas por el joven novillero hicieron que el público solicitase con fuerza el trofeo.

Acabó García de ganarse la puerta grande al cortar otro apéndice al novillo de “Miguelín” que hizo cuarto, novillo con nobleza, pero que acusó estar flojo de los cuartos traseros. Tampoco pudo Álvaro recibir a este novillo de forma lucida, aunque sí fue vistoso el quite por navarras. Dispuesto se mostró manejando la pañosa ante este novillo que llegó parado al tercio final. Anduvo eficaz manejando la tizona por lo que su labor fue premiada con el otro apéndice que descerrajaba la puerta grande.

Las dos orejas cortaría Álvaro García al novillo de Sayalero Monje que hizo quinto. Un novillo que tuvo un comportamiento desigual en los primeros tercios, pero que llegó con nobleza al tercio de muleta. Lo recibió Álvaro de forma variada con el capote intercalando verónicas y chicuelinas. Con la muleta, instrumentó una breve faena con ambas manos que vivió sus mejores momentos cuando García se echó la franela a la mano zurda. Manejó con efectividad los aceros y el público solicitó con fuerza el doble trofeo para premiar la labor del novillero local.

No consiguió tocar pelo Álvaro en los novillos lidiados en primer, segundo y sexto lugar. Con el primero,  novillo noble, aunque muy flojo, de Mercedes Pérez Tabernero, no llegó a acoplarse. Inédito quedó con el manso y descastado de Ignacio Monje que hizo segundo. Y con el noble, aunque escaso de fuerza, de Fernando Peña que cerró plaza, anduvo airoso en las verónicas de recibo. Ya con la muleta, anduvo a gusto en una labor en la que destacaron los pasajes con la mano diestra. No estuvo acertado a la hora de manejar los aceros y el premio a su labor quedó en una vuelta al ruedo que precedió a la postrera salida por la puerta grande del novillero sansebastianero.

Álvaro García saludó una ovación tras romperse el paseíllo.

No se acopló a la embestida del noble, pero parado primero
de Mercedes Pérez Tabernero.

Poco pudo hacer con el manso segundo
de Ignacio Sayalero.

Quitó por gaoneras al de López Gibaja que hizo tercero.

Una oreja cortó tras su labor ante este novillo.

Dispuesto anduvo ante el cuarto del hierro de
"Miguelín".

Otra oreja se llevó tras su actuación.

Al natural llegaron los mejores momentos ante el de
Sayalero Monje que hizo quinto.

Su labor fue premiada con las dos orejas.

Así lanceó a la verónica al de Fernando Peña que cerró plaza.

Entrañable imagen en la vuelta al ruedo.